Anonadado me hayo después del partido de anoche. Ganar a Osasuna en el Reyno de Navarra por cojones y poniendo el autobús delante de un inconmensurable Thibaut Courtois, con gol de Godín, de rebote en el área pequeña. No se si sentirme contento o avergonzado por la actuación de los nuestros. Pero creo que me inclino mas por la satisfacción. Alguien se preguntará que mucho defender al Barça de Pep sobre el Real Madrid de Mou, de criticar la idea futbolística del portugués ante los catalanes, o de alabar la NBA por encima del baloncesto Europeo, donde la táctica prima mas que el ataque, por ejemplo, para luego contentarme y disfrutar con un cerrojazo en toda regla frente al Osasuna. Pero hay que tener en cuenta varios factores: hace un mes y medio el equipo estaba desahuciado, a diez puntos de Champions y siendo un coladero. Los navarros venían de empatar la semana pasada en el último suspiro al Valencia, son un equipo muy fuerte en casa. Las bajas de Diego y Gabi propiciaron una vez más un centro del campo inédito desde la llegada del nuevo técnico... En definitiva, había que ganar como fuera. No hace falta justificarlo pero lo hago por mí no por vosotros. Perdonadme la soberbia. Ayer pasé un postpartido bastante contradictorio. Mi conciencia futbolistica tuvó un importante encontronazo con mi corazón rojiblanco. Siempre me he considerado un romántico, incoherente en muchas conductas, pero un romántico. Y ayer la victoria de los colchoneros en Pamplona me produjo una pequeña crisis de identidad futbolera. Solucionada gracias a esas justificaciones que os estoy explicando, y a que el Cholo tiene carta blanca por ahora si consigue el objetivo* para el que fue reclutado.
Otra de las razones por la que superé la crisis de anoche fue al echar la mirada a los primeros tres partidos del año 2012. Me gusta mucho como Diego Pablo Simeone se adapta a las circunstancias, a lo que el equipo puede darte dependiendo del rival. No era partido el de ayer para jugar abiertos, para ceder centros fáciles o para levantarse deprisa después de una patada. Y el entrenador argentino aplicó la lógica. Contra el Málaga también se especuló con el resultado, era el primer partido, los equipos de Pellegrini tienden a dominar el juego y había que puntuar como fuera, ganar tiempo. Las goleadas a Villareal y Real Sociedad fueron otra cosa. El Atlético de Madrid arrolló. La situación lo permitía. En San Sebastián el rival jugó atrevido debido a la adversidad del primer gol. En casa, como frente al equipo castellonense, exceptuando los rivales fuera de alcance (Barça y Real Madrid), hay que ir a por todas desde el primer minuto. Simeone sabe lo que esa grada exige. No dudó de que veremos mas partidos como el de anoche, como visitantes en su mayoría, y de que alguno se perderá, pero sabemos que tenemos un entrenador que conoce sus armas y no dudará en utilizarlas. El objetivo es claro, alcanzar la máxima competición europea y crecer como equipo.
Dejemos ya el dramatismo de película barata. A dos puntos de Champions League, solidez, trabajo en equipo, cojones, etc. Quien nos lo iba a decir. En las próximas jornadas pasará cualquier cosa, no creo que esta racha sea pueda mantener mas allá de la visita del Barcelona de Pep, pero sería un gran golpe en la mesa llegar a ese partido invictos, si puede ser cerca del Valencia me tatúo a Simeone en una nalga.
La mención especial de hoy (que estoy por convertirla en sección independiente dentro de los postpartidos) es para Courtois. Porterazo dónde los haya. Todo el trabajo colectivo de ayer no hubiera servido de nada sin este hombre bajo los palos. Los equipos se construyen desde la defensa y antes de la línea defensiva está la portería. No se podía competir en precio ni en categoría con el Chelsea a la hora de fichar en propiedad a este jugador, pero costando menos de la mitad de lo que se pagó por De Gea habría sido un chollo. Ferguson se debe estar dando de cabezazos por no haberse fijado en esta figura emergente. Ojalá que se pueda prorrogar su cesión un año más.Y mención de honor a Perea, trescientos partidos ya. Jugando con todos los entrenadores.
*Otro objetivo del Cholo es el de acallar las protestas contra la actual directiva por medio de las victorias. Cosa lógica para otros clubes, pero no para este, porque somos una parte importante de aficionados que no olvidamos el problema institucional. No olvidamos que los gestores, ladrones de este club, se deben marchar. Ya no por su mala gestión o por robarlo, si no por una cuestión ética. Gil Marín fuera del Calderón, por favor. Váyase.
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